Miles de quejas de la plantilla sobre la presión comercial y la mala praxis de venta. Miles de empleados agotados, exhaustos, estresados y deprimidos por esta agotadora y sistemática presión de los DT, que cae en cascada hacia los DC y los Directores Área Negocio y que provoca inundaciones en las oficinas.

Desde SECB venimos denunciando esta mala praxis insistentemente, y la única respuesta que hemos obtenido por parte de la Dirección es que «son casos aislados»:

No, no lo son.
Y lo que es peor,
ustedes lo saben.

Seguro que la mayoría de nosotros hemos disfrutado de la magnifica película “Los Hermanos Marx en el Oeste”. Una de las escenas más famosas es aquella en la que, para que el tren llegue lo antes posible a su destino y sin bajar su velocidad, los protagonistas no paran de pedir madera.

Si afinamos nuestros oídos
seguro que todos oiremos
“¡más madera!, ¡más madera!”

Pero desgraciadamente no son los Hermanos Marx quienes lo gritan, son nuestros DAN y DC a través de innumerables y agotadores mails, llamadas, reuniones, etc.

Ya hace demasiado tiempo que en nuestra Entidad existe una política de imposición de retos. No hay negociación, no hay propuestas por parte de los directores, no existe el feedback  necesario. Se aceptan y se cumplen. Entonces, ¿dónde está el problema? Pues el problema está en que los mandos intermedios ya no es que quieran alcanzar esos retos:

es que quieren triunfar,
quieren ser los mejores

Podríamos pensar (aunque ya no nos dejan ni disfrutar del placer de pensar) que nos piden “más madera” porque es bueno para la Entidad, y, por consiguiente, para todos nosotros. Pero es que nos cuesta mucho entenderlo y…creerlo.

¿cuándo nos gritan «más madera»?

• Cuando nos exigen el 140% de los retos programados. Insistimos en que podría ser porque es lo que la Entidad necesita. Pero entonces… ¿por qué no ponen esos retos de inicio?
• Cuando nos exigen que cumplamos las metas volantes ante todo y por encima de todo. Pero no quieren el 100%, quieren el 150% de dicha meta volante. Podría ser porque así en octubre ya estamos tranquilos con los retos, pero llega octubre y nos siguen exprimiendo.
• Cuando nos exigen que antes de que salgan los productos (móviles, televisores, renting…), ya tengamos tropecientas ventas hechas, pero seguimos sin entender por qué SIEMPRE nos quedamos sin stock, haciendo el ridículo frente a los clientes.
• Cuando nos incitan a dejar todo lo que estemos haciendo para contratar el producto estrella de la semana. ¿Qué pasa con todo lo demás? ¿Por qué ya no es importante?

¿Es preciso tensionar a toda una Territorial únicamente para que su DT salga bien en la foto? ¿De verdad es necesario enviar un artículo sobre las comunidades con mayores robos con violencia para presionar la venta en esas zonas? ¿Puede ser que un DT presione a sus DAN en una campaña en particular y luego descubramos que YA van los primeros en el ranking?

Pero ¿qué están buscando? ¿Prestigio, honor, posicionarse en la parrilla de salida para conseguir un destino mejor?

Pues no, la razón no es otra que
la avaricia por los premios

Los dichosos premios, rematados con los maravillosos bonus. Porque en las bases de las campañas se han publicado los premios para las oficinas, pero no los que cobrarán nuestros superiores. ¿Por qué?  ¿Tan elevados son esos premios? Y, lo más importante… ¿es ese el motivo real por el que «debemos dejarlo todo y vender el producto de campaña» como si nos fuera la vida en ello?

SECB sabemos cuáles son esos fabulosos premios que ustedes se llevan por exprimir a la plantilla y también sabemos que esta situación sólo se define con un adjetivo: AVARICIA. Ahora se entienden muchas cosas, muchas y malas formas, tanta insistencia, tanta presión desmedida y tanto objetivo imposible. ¡Se lo llevan calentito!

Para que os hagáis una idea, ¿sabéis lo que se lleva un DAN en la campaña de alarmas?

5.000€ si llegan al 100% del reto.

Pero que nadie se ponga nervioso, que si el DAN no cumple con el reto de campaña también tiene premio…1.000€ mínimo. ¿A qué ahora se entienden mejor las cosas?

Y, al mismo tiempo…

Mientras la Dirección pasea por el mundo los excelentes resultados de nuestra Entidad, los empleados sufrimos en las oficinas las penurias por falta de presupuesto para reparaciones.

Cajeros

Es totalmente vergonzoso. Innumerables averías, quejas de los clientes, cajeros sin funcionar varios días, descuadres, etc.

Aire acondicionado

No queremos ni pensar donde estaría ya el responsable de mantenimiento de las Torres si el aire acondicionado de «las plantas nobles» no funcionara durante dos semanas. Pues señores, tienen oficinas donde no funciona desde hace más de tres meses. Saquen el dedo por la ventana, esperen dos minutos y observen que… es verano.

Recicladores e impresoras

Otro tanto de lo mismo. Además, con tablets que tardan una eternidad en funcionar, con innumerables fallos al escanear documentación, etc.  Estamos en 2018, y no paramos de recoger premios al vanguardismo y las nuevas tecnologías. Falacia. Hacia fuera somos los mejores, pero si miramos hacia dentro…

Facturas por manutención

Continúan las “recomendaciones” de no sobrepasar un tope de euros por factura de comida. Normal. Tenemos la mitad de los cajeros por cambiar o arreglar, y no funciona el aire acondicionado. De algún sitio tenemos que sacar el dinero ¿no?

Esto es el día a día de sus oficinas. Pero ustedes ni se molestan en enterarse de lo que pasa. Están muy ocupados en hacerse fotos con famosos vanagloriándose de nuestra Obra Social. Una Obra Social que, por cierto, conseguimos gracias a los beneficios obtenidos por los empleados a los que no paran de gritarles ¡más madera, más madera!