El día 2 de abril se inició la campaña del I.R.P.F.
En estos últimos días, alguna zona de área de Negocio se ha querido convertir en una Delegación más de Hacienda dando instrucciones a los empleados para que se ofrezcan a realizar la declaración de la renta a los clientes. ¿Para qué? Pues para obtener información que podamos usar comercialmente.
Desde SECB queremos recordarles que, tanto los productos como los servicios que se comercializan en CaixaBank, son desarrollados y planificados previamente por departamentos especializados que garantizan el mayor grado de protección a nuestros clientes y evitan incurrir en riesgos operacionales y reputacionales.
La única información que se puede transmitir a nuestros clientes es la que se encuentra en la ficha del producto, que garantiza que la información que se transmite es veraz y nos eximen, ante posibles errores, de responsabilidad.
Cualquier otra información que se dé al cliente o servicio prestado fuera de los que estén autorizados y protocolizados por la entidad, quedan fuera del control de CaixaBank y, por tanto, podrían acarrear consecuencias ante posibles reclamaciones de clientes.
Tampoco debemos exigir al cliente documentación más allá de la estrictamente necesaria para la formalización de operaciones de activo o la exigida para el cumplimiento de alguna norma legal (KYC).
Si tienes alguna duda ponte en contacto con tu delegado del SECB.
con formación y titulación necesaria,
pueden asesorar sobre gestión de
patrimonio y planificación fiscal.
